Y con esta entrega llegamos al final del ejercicio de introversión musical al que me he autoexpuesto para poder sacar fuera lo que me mueve por dentro. Ahí van los 10 últimos…
Tras la separación de Modern Talking, uno de sus componentes, Dieter Bohlen, decide crear un nuevo grupo, Blue System, al que le llega a dar una vida de 11 discos. Twilight (1989) es el tercero y, para mí, el mejor de todos ellos. Un Dieter en estado de gracia produjo diez maravillosas canciones que resumen lo que este productor alemán podía ofrecer. No decepcionó. Unas voces muy diferentes a las oidas con Modern Talking pero que conferían una personalidad muy definida al grupo (al margen de todos los escándalos ocasionados por ese tema) y que dotaban de un empaque muy personal todos sus discos. Desde Magic Symphony (que abre el disco) a Everything I own (el broche de oro del disco) el recorrido auditivo es delicioso.
La diva resurgida de sus cenizas gracias a Pet Shop Boys. Nadie se esperaba que alguien como ella pudiera llegar a dejarse producir por este dúo británico de pop electrónico. La unión fue brutal y de esa colisión de genios surgió Results (1989) un disco que permitía a Liza brillar, deslizarse y actuar en melodías épicas, teatrales y oníricas que pasaban por un tamiz pop moderno, con el toque reconocido de Pet Shop Boys, y que permitieron que la voz tan característica de Liza encajara a la perfección en este puzzle de canciones que daban como resultado final un disco eterno. Tras las conocidas Losing my mind o Don´t drop bombs se esconden versiones como Twist in my sobriety o Rent y joyas como Love pains o Tonight is forever.
Mecano. Ay Mecano. Tras este disco (quizás el segundo y el tercero se puedan salvar) me empezaron a desencantar y a gustar canciones sueltas. Pero este disco, Mecano (1982) contiene la esencia de un pop moderno que estaba gestándose a comienzos de los 80 en España. Un sonido muy característico que el grupo perdió con el paso del tiempo y que acabó desencantándome. Tras sus clásicos innegables como Hoy no me puedo levantar, Maquillaje o Me colé en una fiesta están otras canciones que me llegan más hondo como No me enseñen la lección o Solo soy una persona. Ya sabes, unas canciones que te pillan en una edad en la que la letra se convierte en parte de tu propia vida y te acaban representando sin mas.
Y con ella llegó la Voz. Inmensa, inconmensurable, excesiva, potente y precisa. Mónica Naranjo revolucionó el panorama musical con Palabra de mujer (1997) y es un disco perfecto lo mires por donde lo mires. Tanto su ejecución vocal como su producción está a la altura de lo que se pretendía. Mónica está cómoda cantando baladas y dejándose la piel en locos ritmos que te animan a no parar de moverte. Una voz que traspasó fronteras y que con canciones como Rezando en soledad o Miedo demuestra lo que esa garganta puede hacer. Lejos de caer en la tentación de hacer lo que otras hacían musicalmente, Mónica Naranjo supo europeizar lo que en Latinoamérica ya habían valorado. Confieso mi debilidad por Entender el amor.
La electrónica al servicio de Marilyn Manson. ¿Qué mas se puede pedir?. Todo un despliegue de buen hacer, de sonidos contundentes, de letras irreverentes, provocadoras e irónicas y de una estética cercana al glam andrógino que no me dejó indiferente. Mechanical animals (1998) supone un oasis en un estilo que no es el estilo de cabecera que suelo escuchar ni del que suelo disfrutar. Pero este disco es diferente. a veces recordando a unos Depeche Mode, a veces recordando a unos Manic Street Preachers….pero sin ningun parecido razonable. Diferente a la par que familiar. Sonidos potentes, limpios y envolventes. The dope show, Rock is dead o I don´t like tjhe drugs but the drugs likes me son ejemplo de ello.
Otro gran disco producido por Stock, Aitken y Waterman. No me canso de repetir lo fan que soy de estos productores británicos de los 80. Hicieron renacer a la diva de la música disco de los 70, Donna Summer, y la volvieron a poner en su lugar. Another place, another time (1989) es el mejor resultado que podía tener Donna al colaborar con estos genios. La voz de Donna Summer te guia por estas melodías con estribillos pegadizos para que bailes con ella (This time I know its for real, Love´s´about to change my heart), disfrutes escuchando simplemente sus canciones (If it makes me feel good, Whatever your heart desires) o te emociones sin más (Sentimental, Breakaway). Todo un despliegue vocal al servicio de canciones bien representativas del pop de los 80.
Y pensar que la compañía discográfica, al escuchar este disco, dijo que si era una maqueta. Increible. Salto Mortal (1990) supone el comienzo de una exitosa carrera que pasó por unos primeros discos más bien de corta recepción a nivel público pero donde Alaska y Nacho Canut exponían sus nuevas intenciones musicales. Geniso y figuras, con este disco supieron dar una bofetada sin manos a todos los que no entendían esta nueva dirección. Mi hermano me regaló este cassette que compró en una gasolinera y yo no sabía bien qué iba a encontrarme, pero lo que me encontré fue arte. Mucho arte. No rayé el cassette de milagro. Tantas veces ha sido escuchado. Se abría la puerta a una nueva visión de la electrónica en España.
https://www.youtube.com/watch?v=Y9ZjbcFud5k
El prmer disco de Lisa Stansfield en solitario (previamente había tenido algún coqueteo con productores de acid house con notable éxito) fue todo un descubrimiento. Affection (1989) presenta a una cantante que se convertiría mas tarde en la voz del soul británico. En este trabajo tiene ramalazos del momento musical que se vive en esa época y coquetea desde un house comercial a unos medios tiempos que ensalzan la ya, perfecta, voz de Lisa Stansfield. All around the world es su carta de presentación en forma de primer single al que acompañarían exitos como This is the right time, Live together o Why did I do to you?. Un disco para disfrutar de principio a fin y que te invita a conocer sus siguientes trabajos hasta el día de hoy.
Marta Sanchez demostró a todo el mundo que criticaba su nivel como vocalista en solitario con Azabache (1997) que estaba muy confundido. Una de las voces del territorio patrio se permitió una exhibición vocal y musical espectacular con este disco concebido con el gusto más exquisito. Desde la colaboración de Slash (guitarrista de Guns´n´Roses) en Moja mi corazón hasta la sublime interpretación en Amor perdido el disco navega por unas aguas invadidas por el r´n´b y el funk con destellos de rock y baladas deslumbrantes. Marta Sanchez, vocalmente, se desenvuelve como pez en el agua en todos estos registros que permiten ver a una vocalista en pleno uso de sus potentes cuerdas vocales.
Into a Secret Land (1988) supuso mi romance con Sandra. Anteriormente había disfrutado de sus discos pero esté me llegó mas hondo. Imagino que la edad tambien influye en esto. Alejándose del electro pop que llevaba haciendo, Sandra da un paso más y concibe un disco más abierto (aunque dentro de sus cánones musicales). Su marido y productor por aquel entonces, Michel Cretu, y ella se fueron a vivir a Ibiza y la isla consiguió que este disco tuviera, de alguna manera, su influencia. El aire algo misterioso que se percibía en sus anteriores discos deja paso a una celebración del amor y la vida. Una imagen más fresca, mas relajada y más mediterránea se deja entrever en las nueve canciones que componen este disco.
pienso retro existo 